En dos noches, viernes y sábado, la banda barcelonesa de tributo a The Beatles ha logrado resucitar el espíritu de las noches de este local, uno de los principales reclamos culturales de la noche campogibraltareña.
Formada por cinco músicos provenientes del mundo del beat, el rock, la música clásica y el jazz, Hey Bulldogs funciona con la única intención de plasmar en el escenario la actitud y el nervio de Lennon, McCartney, Harrison y Starr, sin dejar de lago a figuras que fueron fundamentales en su historia, como George Martin o Billy Preston.
Hey Bulldogs demostraron en el escenario de McCartney Bar su compromiso con una idea de show en vivo donde cada elemento se produce en servicio del espectáculo incontestable, echando el resto en coros infinitos de tres, cuatro o cinco voces, arreglos orquestales y sintetizadores sesenteros que abarcan sin complejos desde la llamada Beatlemania de los primeros años del rock contagioso, pasando por sus transiciones de amor a los detalles, a las nuevas guitarras, a la psicodelia, y llegando al punto culminante de las vanguardias, donde cada cosa tuvo su lugar y nunca, desgraciadamente, pudo ser experimentado en directo.
Hey Bulldogs demostraron durante sus dos noches de actuación en Algeciras que no son una banda de tributo al uso. En ellos, el homenaje es música en estado puro que suena a Beatles y a energía sobre el escenario, sin abordar la teatralidead, donde se puede buscar la copia de gestos o estéticas determinadas.
