La GBC ha informado que el avión ha sido alcanzada por un rayo durante la tormenta que azotaba el Estrecho. Según ha relatado un pasajero a dicho medio, el avión estaba a media hora de aterrizar en el Peñón cuando el piloto informó de que había mala visibilidad. Hubo un intento fallido de aterrizaje y, según el mismo testimonio, el avión sufrió varias sacudidas, al tiempo que se produjo un importante destello. El testigo asegura que fue un gran susto.
Una vez que el avión aterrizó en Málaga, según la GBC, el piloto confirmó a los pasajeros que la aeronave había sido alcanzada por un rayo y que tendría que ser examinada por ingenieros antes de su próximo vuelo.
