La Fiscalía pide penas que suman 1.787 años de prisión y 15.188 millones de euros en multas para Antonio Tejón

Este proceso contra uno de los dos hermanos Castaña y la red con la que trabajó en el 2020, cuando estaba todavía en prisión preventiva por otra causa, será el juicio contra el narcotráfico en las costas andaluzas que más acusados reúna.

La Fiscalía Antidroga pediría, según explica EFE, para Antonio Tejón una pena de 15 años y 9 meses de prisión, además de 104 millones de euros de multa por delitos que atentan contra la salud pública, receptación y contrabando debido al uso de narcolanchas prohibidas y pertenencia a un grupo criminal.

Para el resto de los acusados, que se dividen en dos grupos, los 45 que formaban parte de los escalafones superiores de la organización, y otros cien que trabajaban para ellos y hacían tareas menos relevantes, como vigilar o recoger fardos. Para todos ellos la institución pide dos multas de 50 millones de euros, pese a que distintas penas de prisión dependiendo de sus tareas y su participación.

Incesante actividad para introducir alijos de hachís
En una investigación desarrollada en el pasado 2020, el grupo OCON SUR de la Guardia Civil siguió a esta red que en unos meses, algunos de ellos durante el confinamiento, introdujo al menos 9.000 kilos de hachís por las costas andaluzas, valorados en el mercado negro en más de 17 millones de euros.

En principio, Antonio Tejón distribuía órdenes a través de uno de sus hombres, que le visitaba en la cárcel para recibir los mandatos y preparar los operativos para introducir los alijos.

Una vez que consiguió la libertad provisional, y hasta su nueva detención, continuó coordinando las introducciones de droga para lo que se reunía con otros miembros de la banda en otros puntos.

En este sentido y tal y como afirman, el juicio no tendría todavía fecha definida, epro según fuentes jurídicas, como muy pronto se celebrará en 2023, siempre que se supere la dificultad de hallar un espacio que tenga capacidad para albergar a 146 acusados y a sus respectivos abogados.

Los hermanos Castaña serán juzgados junto a otros quince miembros de su red, entre ellos tres agentes policiales, que les alertaban para que escaparan de operaciones policiales. 

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