Según ha explicado la Guardia Civil en una nota, los hechos tuvieron lugar cuando la víctima, que fue la persona que denunció, se encontraba a la salida de un establecimiento tras comprar artículos de primera necesidad. En ese momento fue abordada por un hombre, de unos 30 años de edad, que tras sujetarla por el cuello y amenazarla con una navaja, le exigió que le diese todas sus pertenencias.
Seguidamente se sucedió un forcejeo con la víctima, la cual cayó al suelo de manera violenta, produciéndole varias heridas y erosiones en su cuerpo. Por su parte, el agresor aprovechó que su víctima había quedado en el suelo dolorida y sin reaccionar para sustraerle el teléfono móvil y emprender la huída a la carrera.
Asumida la investigación por los agentes y fruto de las pesquisas realizadas con testigos, se logró identificar al autor, y tras iniciar la búsqueda por la localidad, se procedió finalmente a la localización y detención del mismo, el cual contaba con numerosos antecedentes por hechos similares.
De los hechos se instruyeron las correspondientes diligencias imputándosele al detenido la comisión de un delito de robo con violencia e intimidación, así como por el incumplimiento de las medidas establecidas por Real Decreto 463/2020, siendo puesto a disposición de la autoridad judicial, que decretó el ingreso en prisión.
